Firmar un papel y estampar en ella la firma, entre dos actores de una guerra, en este caso el Gobierno colombiano y las FARC, solo significa firmar que se pone fin a violencia, que la agresión mutua ha acabado, que se pone fin a la guerra. Significa también que las instituciones y organismos del estado se comprometen a respetar ese papel firmado, y los acuerdos alcanzados. Significa que nada ni nadie puede romper ó intentar boicotear ese acuerdo bajo ninguna circunstancia y se actuará severamente contra quien ó quienes pretendan interrumpirlo. Significa que tanto el estado como las instancias militares y policiales, se hacen garantes del cumplimiento de ese acuerdo bajo la ley máxima que es la Constitución. Significa que la Justicia es la única que se encargará de desarrollar lo que a la Paz y a su normal desarrollo compete. Significa que todos los organismos constitutivos del estado, Congreso y Senado y partidos políticos del arco parlamentario, se someten igualmente al respeto a la Constitución y sus leyes. Significa que los ciudadanos tendrán que someterse igualmente a lo que dicte la justicia en este respecto. Y no pretender obrar por libre albedrío. Con esto solo se acaba la agresión violenta pero no significa la firma de la Paz. Obviamente. Con la firma de la no agresión , de la no violencia apenas podrá decirse que empieza el proceso de Paz social.Este proceso será un largo, penoso y doloroso camino de reconciliación, reparación, compasión, restauración de las heridas, compensación, generosidad, perdón y amor, cuyo proceso durará otras generaciones más hasta su término final. Pero ese proceso que empieza ahora será el de la convivencia normalizada entre las ciudades y los pueblos, entre los colombianos de todas las edades y condiciones, entre todos los ciudadanos del territorio colombiano. Será un proceso tanto ó más doloroso que la guerra misma porque hay heridas abiertas, porque debajo de las costras siguen sangrando las heridas de una guerra cruenta y cruel que ha producido cientos de miles de muertos, millones de desplazados, cientos de miles de desaparecidos, millones de refugiados y exiliados. Un conflicto que dura más de medio siglo hundidos en la pobreza, el analfabetismo,la incultura, el odio y la coerción, el silencio y la tortura. Largo y lleno de pedruscos, escombros, desaliento y muchas veces de frusración, será el camino a corto plazo que nos tocará recorrer a los colombianos; pero este camino a diferencia de los anteriores, sí que caminaremos con una esperanza, encima de una alfombra de flores, una realidad de encontrar la armonía y la soñada convivencia. Pero, sin lugar a dudas, tendremos que atarnos los machos fuertes del perdón y la reconciliación, de la compasión y la restauración, del respeto y la tolerancia, y defenderlos con nuestra vida si fuera preciso a quien intente revertir el proceso. Sin Paz no hay progreso ni desarrollo. Sin educación no hay paz ni progreso ni desarrollo evolutivo de la sociedad. Sin Paz no hay individuo feliz ni sociedad que merezca la pena. Sin Paz no hay Vida que transmitir ni proceso por el que velar. Compromiso con la Paz es nuestro más ferviente deseo, nuestro deseo más luminoso y nuestro pensamiento más fiel. La Paz es nuestra dignidad y decencia. Nada hay más caro que la Vida, ni tan siquiera la Muerte.
-
Recent Posts
Archives
- April 2023
- February 2023
- November 2022
- May 2022
- July 2021
- June 2021
- April 2021
- March 2021
- January 2021
- August 2020
- July 2020
- April 2020
- March 2020
- January 2020
- September 2019
- March 2019
- September 2018
- February 2018
- July 2017
- February 2017
- November 2016
- September 2016
- January 2016
- November 2015
- October 2015
- September 2015
- March 2015
- January 2015
- December 2014
Meta